La O.N.U. de Déborah Zamora

Les transcribo lo que dije en el momento cívico de ésta semana. Era sobre la O.N.U y creo que me desvié un poco, valió la pena.
La Organización de las Naciones Unidas fue creada para satisfacer el deseo del hombre por mantener la paz mundial; para crear un mundo feliz, ese mundo que tanto soñamos.
La paz es un estado de equilibrio y estabilidad interna; lo contrario a la maldad, al odio, al egoísmo, a la guerra. La paz se labra cuando el hombre quiere busca la luz que ilumina al mundo y lo llena de esperanza; la paz empieza cuando el hombre se da cuenta que la guerra tiene sus raíces en su propio corazón. La triste realidad es que los conflictos que creamos con nuestras actitudes, los insultos que decimos sin pensar, los problemas que hacemos de pequeñas cosas que nos suceden nos llevarán a futuro a crear esas guerras que tanto daño hacen a la humanidad.
Gandhi dijo: " El cambio que quieres ver en el mundo empieza en ti", empecemos desde hoy a crear una cultura de paz, debemos darnos cuenta el poder que tenemos en nuestras manos para empezar el cambio. ¿Cómo?  Empecemos la revolución del respeto: primeramente hacia nosotros educándonos, cuidando nuestro cuerpo y creciendo interiormente; respetemos a los demás, a la naturaleza, Conseguiremos un ambiente tranquilo que nos conduzca a la ansiada paz.
Habrán días en que nos inunde ese sentimiento de que es muy poco lo que hacemos; que no es más que una gota en el océano; pero de seguro ese océano sería menos sin esa gota; imaginémonos al mundo como un cuarto completamente oscuro, y nosotros entramos con un simple y pequeño fósforo prendido, no veremos casi nada porque su flama es tan tenue, no tiene mucho alcance, pero si somos miles de personas con flamas iguales, la luz invadirá hasta los rincones más recónditos de esa tenebrosa habitación. No desmayemos unamos nuestras fuerzas y logremos el cambio que todos necesitamos.
 

"Moral Individual" de Alfredo Pérez Guerrero

Con tantas cosas que suceden en el día a día del colegio y las palabras de mi mamá de que debemos leer este libro, me obligaron a buscar concienzudamente este pequeño libro verde en la biblioteca de la casa. Como ustedes pudieron ver en una de mis entradas, no es muy grande, pero el asunto es que no se si les pasa, pero cuando buscas algo en particular y tratas de encontrarlo te la pasas ojeando todo lo que encuentras y se te pasa el tiempo. De todas formas lo encontré y me ayudó mucho para aclarar ciertas definiciones que me tenían muy confundida.
Un cuento de José Enrique Rodó, "Sueño de noche buena", me maravilló y me hizo dar cuenta que debemos desarrollar día a día nuestro gusto por los sentimientos sublimes que engrandezcan nuestro espíritu y nos impulse a buscar nuevas formas de llegar a ser "seres humanos."
Les transcribo un fragmento del libro de Pérez Guerrero: " Como una planta es el hombre. Necesita sabia para nutrirse y elevar su tronco; necesita, igualmente aire, luz y calor para colorear su ramaje y elaborar a flor que se ahrá sabroso fruto. Flor y fruto en nosotros son la belleza y la bondad y no podemos perderlas al sacrificar las enseñanzas de la moral, a los dictados de nuestro cuerpo... adquiramos esa preciosa cualidad de delicadeza moral que nos llevará a gozar de todo aquello que es hermoso, verdadero o excelso..."

Existe también en Paraguay,  un pueblo con el nombre de este poeta escritor, en la provincia de Soriano. Miren esto, definitivamente grandioso.